Oslo 2010

  55º Festival de la Canción de Eurovisión
 Satellite (Lena) - Alemania


La 55ª edición del Festival de la Canción de Eurovisión se celebró en Noruega, país ganador de la 54 edición celebrada en Moscú en 2009. 39 países participaron en esta edición al no asistir ni Andorra, ni Montenegro, ni Hungría, ni la República Checa por motivos económicos. Con esto la masiva participación el festival más famoso del mundo volvió a descender por segundo año consecutivo alejándose del record de 43 de la final de 2008 celebrada en Belgrado.

Por vez primera los votos del público se pudieron emitir desde la primera canción. Si el año anterior había habido una única y exclusiva favorita que no falló y ganó el festival con la mayor cantidad de votos conseguidos nunca, este año el resultado final estuvo algo más reñido al principio, aunque poco a poco Alemania fue marcando diferencias con el resto. No obtuvo un gran número de máximas puntuaciones pero recibió votos consistentemente de casi todos los países.

La canción alemana entró tarde en la carrera por el triunfo final, no estaba en las listas de favoritas hasta unas pocas semanas antes del festival, pero su inmensa popularidad en Alemania donde llegó al numero uno en las listas y consiguió tres discos de oro y el éxito en otros países de centro Europa la hicieron llegar a la gran final como la número uno en las casas de apuestas.

La actuación española se vio disturbada por la irrupción de un espontáneo en el escenario. Se trataba del ya famoso o infame según se mire, Jimmy Jump, un seguidor del Barça que ya a protagonizado otras irrupciones famosas como en la final de Roland Garros ante Roger Federer. Esta era la segunda vez en la historia del festival que un espontáneo saltaba al escenario -ya había ocurrido en 1964- y curiosamente lo ha hecho el año en que el lema del festival era "Comparte el momento". Desde luego el chico se lo tomó al pie de la letra. Por este motivo y de acuerdo con las normas del festival el representante español, Daniel Diges, tuvo la oportunidad de repetir su actuación nuevamente al final de la ronda tras la actuación de Dinamarca. Diges afirmó después que esto le había hecho sentirse como si fuera el ganador, ya que solamente la canción ganadora tiene el privilegio de ser interpretada una segunda vez.

Recordar que ya en 1958, Doménico Modugno tubo también que repetir su ahora famosísimo "Volare" debido a un fallo en la retransmisión que impidió que algunos países pudieran ver su actuación.

España quedó en 15º puesto, en el medio de la tabla, por encima de países como Noruega, la anfitriona, Islandia, una de las grandes favoritas y de Irlanda. El Reino Unido volvió a quedar en último puesto al igual que en 2008. Por segundo año consecutivo no gana un país del este. Turquía, siempre ayudada por el voto de su público repartido por toda Europa quedó segunda con un rock impresionante y lleno de fuerza que bien hubiera merecido ganar.

Pese a quién pese y por muchas confabulaciones entre países que se quieran ver, lo cierto es que al final, casi siempre, gana la canción que gusta a la mayoría, y que suele ser aquella que plantea algo diferente. La propuesta de Lena, sencilla, fácil , juvenil y moderna es una buena doble noticia. Por una lado demuestra que una canción puede ganar sin necesidad de aparatosísimas puestas en escena. Por otro, que el "big four" no está maldito, lo único que estaba era rancio y obsoleto. En cuanto se ponen las pilas suben como las espuma. Lo hicieron Francia y Reino Unido en 2009 y ahora Alemania en 2010 ganando por segunda vez en su larga historia en Eurovisión (es el único pais que ha participado en todas las ediciones, y solamente estuvo ausente de la final en 1996, cuando su canción no fue preseleccionada) la anterior victoria había sido en 1982. Veintiocho años separan ambos triunfos. Enhorabuena Alemania.

Nos vemos en Düsseldorf en 2011.